22 noviembre 2006
Dolor

Nunca es fácil, describir en breves párrafos la interpretación de un cuadro tan emblemático como el Guernica, más aún, cuando su propio autor, nunca entregó una versión sobre él.
Entonces, lo que aquí se escribe, es producto de la lectura e investigación de los sucesos acaecidos en la época.
Pero antes de empezar, una breve y muy básica introducción al tema.
En Febrero de 1936 las elecciones son ganadas por el Frente Popular, el que con el paso de los meses se muestra incapaz de mantener el orden y la situación del país se encuentra fuera de orden. Durante esta etapa, es asesinado un prominente político de derecha. Franco se alza rápidamente como líder de la derecha, aunando fuerza bajo el nombre de Nacionalistas en abierta oposición a los Republicanos, comienza entonces la guerra civil, que enfrenta al gobierno español contra la insurrección del ejército de Franco.
En el desarrollo de esta afrenta, la República es apoyada por Stalin, mientras que Italia y Alemania apoyan a Franco con apoyo material y humano. Asimismo, Alemania, por su propia cuenta y sin mediar aviso alguno a quien apoya, decide bombardear Guernica el 27 de abril de 1937.
Es así como la fuerza aérea germana,, la Luftwaffe, ejecuta el primer ataque masivo contra una población civil, bombardeando un desprotegido poblado carente de importancia militar y estratégica, matando en esta acción cerca de 1.600 personas, únicamente con el propósito de probar sus nuevas armas y aviones ante la cercanía del inicio de la segunda Guerra Mundial.
Ante estos hechos, Picasso comienza a trabajar en la que sería la obra de arte de mayor significación política de todo el pasado siglo, en donde se mezcla el placer sublime de lo estético con el desgarrador dolor de la historia que muestra.
Cuando Picasso comienza a pintar, de su cabeza y de su mano van surgiendo cientos de ideas, de sentimientos, su propia historia, sus tradiciones, sus mitos y sus temas preferidos, dando nacimiento a un cuadro que es hijo del drama, de la pasión de su alma de español y de artista, explotando en un grito de dolor y horror, de furia y de guerra.
Entonces, lo que aquí se escribe, es producto de la lectura e investigación de los sucesos acaecidos en la época.
Pero antes de empezar, una breve y muy básica introducción al tema.
En Febrero de 1936 las elecciones son ganadas por el Frente Popular, el que con el paso de los meses se muestra incapaz de mantener el orden y la situación del país se encuentra fuera de orden. Durante esta etapa, es asesinado un prominente político de derecha. Franco se alza rápidamente como líder de la derecha, aunando fuerza bajo el nombre de Nacionalistas en abierta oposición a los Republicanos, comienza entonces la guerra civil, que enfrenta al gobierno español contra la insurrección del ejército de Franco.
En el desarrollo de esta afrenta, la República es apoyada por Stalin, mientras que Italia y Alemania apoyan a Franco con apoyo material y humano. Asimismo, Alemania, por su propia cuenta y sin mediar aviso alguno a quien apoya, decide bombardear Guernica el 27 de abril de 1937.
Es así como la fuerza aérea germana,, la Luftwaffe, ejecuta el primer ataque masivo contra una población civil, bombardeando un desprotegido poblado carente de importancia militar y estratégica, matando en esta acción cerca de 1.600 personas, únicamente con el propósito de probar sus nuevas armas y aviones ante la cercanía del inicio de la segunda Guerra Mundial.
Ante estos hechos, Picasso comienza a trabajar en la que sería la obra de arte de mayor significación política de todo el pasado siglo, en donde se mezcla el placer sublime de lo estético con el desgarrador dolor de la historia que muestra.
Cuando Picasso comienza a pintar, de su cabeza y de su mano van surgiendo cientos de ideas, de sentimientos, su propia historia, sus tradiciones, sus mitos y sus temas preferidos, dando nacimiento a un cuadro que es hijo del drama, de la pasión de su alma de español y de artista, explotando en un grito de dolor y horror, de furia y de guerra.
Lo más chocante del cuadro es que Guernica no muestra la guerra, sólo el nombre puede asociarse a un hecho de la guerra de España, no representa ni muestra un bombardeo, ni hay armas convencionales, no hay vencidos ni vencedores.
En la obra encontramos a un toro cuyo rostro, se presume, representaría las facciones de Picasso, un caballo herido por una lanza, la cabeza y los brazos de un hombre con una espada rota, una madre con su hijo muerto, una mujer corriendo, otra mujer en llamas y una cuarta que alumbra la escena desde una ventana.
Al observar la obra de derecha a izquierda, podemos ver una mujer desesperada, gritando de dolor dentro de una casa que se derrumba y arde. Inmediatamente a su izquierda hay dos mujeres más, la de la parte superior se asoma por una ventana y lleva en su mano una lámpara, que simboliza la luz de la verdad y que ilumina la destrucción producida por la barbarie. La mujer que encontramos en la parte inferior, sale de la casa arrastrándose en su agonía. En el centro de la obra está el caballo, retorciéndose sobre sí mismo. Su boca está abierta como una muestra de su excitación ante los sucesos, su lengua se muestra atravesada por un espolón, como signo del más intenso de los dolores. Justo sobre su figura, está el sol que se muestra empequeñecido, en forma de óvalo y con una ampolleta en su centro, como indicando que el humo del bombardeo ha opacado la luz natural y que la única posibilidad de obtenerla ha de ser artificial.
A su lado, a la izquierda, hay un pájaro que agita sus alas y grita desesperado al infinito, como si ello fuese la manera de que el cielo le entregue una respuesta de lo que esta sucediendo.
Un guerrero que yace muerto con su espada rota en la mano, esta bajo las patas del caballo, simbolizando a quienes han perecido durante la afrenta.
Siguiendo hacia la izquierda, un toro sorprendido y desconcertado observa los acontecimientos. A su lado, esta la dolorosa escena de la madre que mira al cielo con escandalizado espanto, mostrando su desesperación y tristeza por el dolor de llevar entre sus brazos el cuerpo de su hijo ya muerto.
En la construcción de este cuadro, el pintor renuncia al uso de colores y utiliza únicamente, el blanco, el negro y una escala de grises, como una forma de destacar el drama y el dolor que retrata, transformándolo en un cuadro donde los sentimientos hablan por medio de los gritos de los personajes, de los gestos de las cuatro mujeres en actitudes desesperadas, mostrando una población civil indefensa, pero también al soldado que ha caído durante la defensa de su pueblo, junto a ellos los animales que ajenos a la locura humana, se unen en un escenario en donde todos mueren en medio de un drama humano y por las bombas caídas.
Guernica es una oda a la sinrazón de una guerra.
En la obra encontramos a un toro cuyo rostro, se presume, representaría las facciones de Picasso, un caballo herido por una lanza, la cabeza y los brazos de un hombre con una espada rota, una madre con su hijo muerto, una mujer corriendo, otra mujer en llamas y una cuarta que alumbra la escena desde una ventana.
Al observar la obra de derecha a izquierda, podemos ver una mujer desesperada, gritando de dolor dentro de una casa que se derrumba y arde. Inmediatamente a su izquierda hay dos mujeres más, la de la parte superior se asoma por una ventana y lleva en su mano una lámpara, que simboliza la luz de la verdad y que ilumina la destrucción producida por la barbarie. La mujer que encontramos en la parte inferior, sale de la casa arrastrándose en su agonía. En el centro de la obra está el caballo, retorciéndose sobre sí mismo. Su boca está abierta como una muestra de su excitación ante los sucesos, su lengua se muestra atravesada por un espolón, como signo del más intenso de los dolores. Justo sobre su figura, está el sol que se muestra empequeñecido, en forma de óvalo y con una ampolleta en su centro, como indicando que el humo del bombardeo ha opacado la luz natural y que la única posibilidad de obtenerla ha de ser artificial.
A su lado, a la izquierda, hay un pájaro que agita sus alas y grita desesperado al infinito, como si ello fuese la manera de que el cielo le entregue una respuesta de lo que esta sucediendo.
Un guerrero que yace muerto con su espada rota en la mano, esta bajo las patas del caballo, simbolizando a quienes han perecido durante la afrenta.
Siguiendo hacia la izquierda, un toro sorprendido y desconcertado observa los acontecimientos. A su lado, esta la dolorosa escena de la madre que mira al cielo con escandalizado espanto, mostrando su desesperación y tristeza por el dolor de llevar entre sus brazos el cuerpo de su hijo ya muerto.
En la construcción de este cuadro, el pintor renuncia al uso de colores y utiliza únicamente, el blanco, el negro y una escala de grises, como una forma de destacar el drama y el dolor que retrata, transformándolo en un cuadro donde los sentimientos hablan por medio de los gritos de los personajes, de los gestos de las cuatro mujeres en actitudes desesperadas, mostrando una población civil indefensa, pero también al soldado que ha caído durante la defensa de su pueblo, junto a ellos los animales que ajenos a la locura humana, se unen en un escenario en donde todos mueren en medio de un drama humano y por las bombas caídas.
Guernica es una oda a la sinrazón de una guerra.
13 noviembre 2006
Abandono

Esta tela corresponde al denominado "período azul" de Picasso que se ubica a comienzos del siglo pasado (entre 1901-04), período el que es protagonizado por un constante aprendizaje donde se muestra ávido en conocer más cosas dentro de la vida más paupérrima y miserable.
Estilo de vida que, tangencialmente adopta durante esta etapa de su vida y que la tela sublimemente, logra transmitir el submundo en que Picasso ha optado por moverse.
Nos muestra un realismo social con una tonalidad azul que se complementa genialmente la con la figura que pone en escena y en percepción de la formación (silente/ausente) de un solitario grupo que habla de su existencia sin mostrase. (quienes escuchan al guitarrista)
Durante esta etapa, Picasso nos entrega cuadros tristes, que evocan la esencia de la tristeza y soledad en que están inmersos sus protagonistas.
Nos muestra un realismo social con una tonalidad azul que se complementa genialmente la con la figura que pone en escena y en percepción de la formación (silente/ausente) de un solitario grupo que habla de su existencia sin mostrase. (quienes escuchan al guitarrista)
Durante esta etapa, Picasso nos entrega cuadros tristes, que evocan la esencia de la tristeza y soledad en que están inmersos sus protagonistas.
mmmmmmmmmm
La sombra de la tristeza traspuesta,
viaja de un extremo a otro, ...
Los versos terminan y no hay aplausos,
no hay vítores ni aclamación alguna.
Sólo queda el viejo con su pena y su guitarra.
mmmmmmmmmmmmmm
Siempre han de ser personajes pobres, con hambre y solitarios.
Asimismo, si observamos con detención, nos daremos cuenta del abandono y soledad que vive en su personaje y en los demás que componen esta etapa.
¿Estaremos ante un autorretrato psicológico del maestro? y ...... ¿será por eso que nos entrega a este viejo de tonos azules, para destacar con un mayor énfasis, el estado de soledad, angustia y tristeza, que nos evidencia su personaje, aferrado a una guitarra que regala lánguidas notas?
Asimismo, si observamos con detención, nos daremos cuenta del abandono y soledad que vive en su personaje y en los demás que componen esta etapa.
¿Estaremos ante un autorretrato psicológico del maestro? y ...... ¿será por eso que nos entrega a este viejo de tonos azules, para destacar con un mayor énfasis, el estado de soledad, angustia y tristeza, que nos evidencia su personaje, aferrado a una guitarra que regala lánguidas notas?
28 octubre 2006
Sentimientos
Con maravillosa técnica Lira nos conduce hacia y entre el romanticismo y el realismo, con un tratamiento de delicadeza, ternura y lirismo. Sus pinceladas están al servicio de una expresión plástica elevada y sobre todo, de una nobleza de conceptos reflejada con serenidad.
"El niño enfermo" pertenece a la veta naturalista dentro de su obra, esto porque en su interior se hacen múltiples las temáticas y las técnicas que utilizó, con una dedicación por completo al arte y con una pintura donde están presentes las atracciones y las oposiciones tan típicas del romanticismo y el realismo.
Por un lado, el misterio y la sofisticación de la mitología que permiten el colorido refinado y las actitudes lánguidas, cargadas de sentimentalismo; por el otro, el estímulo de las escenas del pueblo, la tosquedad propia de las labores duras de los campesinos y el trabajador manual, dando el ambiente con los colores quebrados.
Esta obra del siglo antepasado y de comienzos del pasado es un deleite visual por la preocupación técnica, que no impide el goce de los sentidos, para dejarse llevar por la improvisación que otorga la imaginación frente a la temática que se observa.
"la cruel fiebre es dueña de tu frágil cuerpecito que se niega a abandonarte para que a cambio, tome mis dolidos huesos y así aliviar tu malestar. Ojalá que las hierbas en remojo con esencia y aceite, que con tanta angustia y amor prepara tu abuela, hagan retroceder este calor que te consume.
Oh mi niño, que cruel es nuestra probreza que sólo nos da despojos para cubrirnos y sobras para alimentarnos, pero la vida nos ha regaldo tu ser que es la dicha que ilumina este empobrecido hogar.........¿tienes lista ya el agüita de yerbas?..."
Lira siempre gusta de halagar los sentidos e impactar al espectador con cuadros ambiciosos y monumentales.
Por ello, Pedro Lira nunca nos defrauda.
08 octubre 2006
Algo de lo nuestro

Lo literario se hace presente cuando la obra da cuenta de un momento específico de una historia que nos envuelve al contemplar, con soberana humildad la delicadeza de sus trazos que nos invita a especular con un relato de amor...
"... alguien que ha enviado sus deseos y esperasen esa carta que tus dedos oprimen. Mendigas de los ojos, ¿qué promesas o memorias de amor? ¿ cuáles palabras?.
A tu mano vino el amor a dar su desnuda alarma para luego quedarse a solas en tu mirada casi feliz, casi completamente feliz, sin aprender a olvidarse.
Roto el silencio, la indiscreción exige girar el rostro. Una mano está a la puerta; inminentes los pasos, se cierne la amenaza, pálido temor de espantable día.
Vamos, vamos ya, acuda alguna ocurrencia.
Es tan distinta la verdad con su piel dentro del cuerpo. Apresura algún decir; no harán falta promesas.
Alguien no querido está ahí y tu carta solloza."
O bien de esta otra forma....
"...sus ojos leen espectante aquel pedazo de papel, que un criado de él, a escondidas le ha traído, el placer de la lectura atesorada con oculto amor le exclama ...no sabes cuanto te extraño, cuanto te amo ni cuanto te deseo ... el éxtasís del momento es interrumpido por el sonido de unos pasos y una mano que con la insolencia de la interrupción no deseada, golpea la puerta de la habitación y una voz interrogante, amenza con entrar...¡ la carta ! el temor se apodera de ella y sin tener espacio ni tiempo donde refugiarla, la esconde tras su espalda, entonces girando su talle con natural elegancia, responde, ¡ adelante, pase ud.!..."
La acertada composición lograda por Lira y la densidad pictórica de la tela da cuenta de la maestría técnica alcanzada en su pintura hacia un realismo dotado de mayor naturalidad y de un toque de romántico refinamiento, obteniendo una composición más suelta, natural y equilibrada que invita al espectador a imaginar.
05 octubre 2006
La belleza de la Verdad

Es la descripción que Van Gogh hace de su propia obra, en donde el cielo ocupa aproximadamente la mitad del cuadro, y la noche oscura está presente en la totalidad de su superficie. "Es el cielo estrellado pintado en la noche misma".
La estructura del cuadro es aparentemente sencilla, representa la influencia de la noche en el cielo y en el agua, separados los dos elementos por una línea de focos de luz.
Según este esquema, cielo y agua presentarían prácticamente los mismos tonos, porque el agua actuaría como espejo del cielo. Sin embargo, las luces de gas, al reflejarse en el agua, alteran y enriquecen sus tonalidades.
El cuadro es rico en realismo y, al mismo tiempo, en fantasía e imaginación.
Son realistas y bellísimos los reflejos de las luces, rotos por las leves ondulaciones que la brisa origina en el río, así como los tonos del cielo y el brillo de las estrellas.
Van Gogh, nuevamente realiza maravillas con sus dos colores primarios favoritos, azul y amarillo. También en esta obra hay que preguntarse, dentro del realismo del artista, cuánto hay de realidad y cuánto hay de manipulación para "hacer el cuadro más veraz que la propia realidad".
El pintar las estrellas como pétalos múltiples, etéreos y transparentes, nos dice de la belleza que observa y que nos quiere traspasar.
Sobre las "dos figuritas de enamorados en primer plano", si las ampliamos en nuestros PC’s y las observamos con mayor detención, veremos que los enamorados no son dos jóvenes amantes, típicos de una escena de amor, sino que representan a dos personas cercanas a la tercera edad.
Ella, se cubre con un chal los hombros y su cuerpo vencido, más que tomarse, se apoya en el brazo de su pareja. Van Gogh, tal vez, lleno de esos elevados sentimientos que produce en todo ser humano la contemplación del universo infinito, eterno, profundo, ordenado y sereno, presenta una ofrenda en la pareja de ancianos enamorados, quizás al amor que nunca tuvo y que, con toda seguridad deseaba, pero no el amor fogoso que brinda la juventud, sino al amor infinito, eterno, profundo, ordenado y sereno de una pareja que ha sido capaz de haberlo hecho realidad a través de la convivencia de muchos años.
Si logras descubrir "la verdad que te dice el cuadro", es tener la oportunidad de comprobar y sentir que "La Belleza y la Verdad" nos causan y nos han de causar siempre, una profunda y sincera emoción.
"Noche estrellada sobre el Ródano", es una alegoría a la belleza de la verdad y a la verdad de la belleza misma.
28 septiembre 2006
Sólo Azul
AZUL I, 1961 (Miró, óleo sobre tela de 270 x 355 cms. Colección H. de Givenchy, Francia).
Toda inspiración está en la naturaleza.
AZUL II, 1961 (Miró, óleo sobre tela de 270 x 355 cms. Museo Nacional de Arte Moderno, Centro George Pompidou. París.) Sentimiento de infinito a pesar de ser finito. .
AZUL III, 1961 (Miró, óleo sobre tela de 268 x 349 cms. Museo Nacional de Arte Moderno, Centro George Pompidou. París). Azul intenso y luminoso que evoca el mar infinito.
Este tríptico de Miró titulado Azul, nos habla de que toda inspiración está en la naturaleza. Ese azul que evoca el Mediterráneo que Miró divisa cada día desde su casa en Mallorca, donde logró condensar la esencia de ese mar. El azul intenso y luminoso, para que el mar inmenso te inunde y te produzca el sentimiento de infinitud, provocado por ese océano cuando, desde la orilla es contemplado, a pesar de su finitud.
Palpa la esencia de la naturaleza, permite que la obra vaya directo al corazón, a la sin razón, al sentimiento y hace que el habla enmudezca.
Nos quedemos sin ganas de decir, sin poder decir y con el corazón encogido, pues los cuadros nos han inundado, como el mar con su inaprehensibilidad.
Las manchas negras y roja, pueden representar aquello que queramos, una constelación, el sol o las estrellas, lo grande o lo pequeño con su caractér de finitud o infinitud, la luna, un planeta. No hay elementos que nos ayuden a decantarnos por uno u otro, pueden ser todas estas interpretaciones, aquello que tú quieras, en razón de que se ha logrado crear el absoluto de la naturaleza sin ninguna referencia figurativa a ésta.
Las manchas negras y roja, pueden representar aquello que queramos, una constelación, el sol o las estrellas, lo grande o lo pequeño con su caractér de finitud o infinitud, la luna, un planeta. No hay elementos que nos ayuden a decantarnos por uno u otro, pueden ser todas estas interpretaciones, aquello que tú quieras, en razón de que se ha logrado crear el absoluto de la naturaleza sin ninguna referencia figurativa a ésta.
No hay más lugar a proposiciones de expresión, más bien está fuera de los límites del lenguaje, en este caso el escrito; lo bello sólo se puede decir en un término: bello.
La pintura es bella.
Lo bello es indecible.
La posibilidad es la descripción teórica.
Los colores son bellos, adquieren una fuerza sin serlo; es decir, adquieren fuerza no por golpe, sino por astucia, paciencia y tranquilidad, equilibrio.
Hay una bellísima tranquilidad en el fondo.
Hay paciencia en el azul, y la astucia es la paciencia misma, la razón de ser paciente para provocar lo contrario.
La astucia es haber tenido de principio, como punto de partida, la paciencia de haber elegido dicho estado y mantenerlo.
El equilibrio es una consecuencia de la paciencia y la tranquilidad.
La tranquilidad existe puesto que la paciencia se cumple, es la materialización de la astucia. Como el mar se mantiene tranquilo, porque es paciente al golpe certero contra las piedras de las costas; como el cielo es paciente de expulsarnos como seres diminutos, y hay tranquilidad.
La astucia es esto, cumplir la tranquilidad.
Eso es el azul: la astucia materializada. Pero entonces viene la fuerza (fin último de la astucia): aquello que hace del equilibrio la posibilidad de todos los contrarios que la condicionaron; la tranquilidad cesa, sólo existe en el azul, no en los entes que en él descansan; la paciencia deja de entenderse y se olvida al primer instante de aparición de los entes.
Pero la astucia continúa en lo azul, sólo ahí es posible, no puede omitirse, pues se perderían los contrarios del azul y sus entes en éste; la astucia mantiene que los entes choquen en el azul y que el azul les pueda significar.
La pintura es bella.
Lo bello es indecible.
La posibilidad es la descripción teórica.
Los colores son bellos, adquieren una fuerza sin serlo; es decir, adquieren fuerza no por golpe, sino por astucia, paciencia y tranquilidad, equilibrio.
Hay una bellísima tranquilidad en el fondo.
Hay paciencia en el azul, y la astucia es la paciencia misma, la razón de ser paciente para provocar lo contrario.
La astucia es haber tenido de principio, como punto de partida, la paciencia de haber elegido dicho estado y mantenerlo.
El equilibrio es una consecuencia de la paciencia y la tranquilidad.
La tranquilidad existe puesto que la paciencia se cumple, es la materialización de la astucia. Como el mar se mantiene tranquilo, porque es paciente al golpe certero contra las piedras de las costas; como el cielo es paciente de expulsarnos como seres diminutos, y hay tranquilidad.
La astucia es esto, cumplir la tranquilidad.
Eso es el azul: la astucia materializada. Pero entonces viene la fuerza (fin último de la astucia): aquello que hace del equilibrio la posibilidad de todos los contrarios que la condicionaron; la tranquilidad cesa, sólo existe en el azul, no en los entes que en él descansan; la paciencia deja de entenderse y se olvida al primer instante de aparición de los entes.
Pero la astucia continúa en lo azul, sólo ahí es posible, no puede omitirse, pues se perderían los contrarios del azul y sus entes en éste; la astucia mantiene que los entes choquen en el azul y que el azul les pueda significar.
¿Qué más se puede agregar?.....¿la maldad?.........
La maldad es todo.
Es cada signo lingüístico.
Es el significado de cada signo, y su fusión en la proposición.
La maldad es la necesidad que nos produce el "ser" humano y al humano, para ser humano.
Es cada signo lingüístico.
Es el significado de cada signo, y su fusión en la proposición.
La maldad es la necesidad que nos produce el "ser" humano y al humano, para ser humano.